CAPITULO 1-EL FESTIVAL V

Al mismo tiempo, al este de Lunéville. Un hombre puso un pie en una posada de Harville, en un momento, la posada se llenó de una atmósfera algo melancólica.

La nieve incluso ahora continuaba cayendo sobre las ventanas en Lunéville.

En la habitación de una posada, un hombre se cruzó de brazos y frunció el ceño pensativo.

Su objetivo era acercarse y destacarse de diversas maneras, incluso había podido adquirir varias pruebas.

Sin embargo, toda la información eran solo cosas menores. Nada de la información era algo que pudiera convertirse en una evidencia sólida, era como si cuanto más se acercaba ella, más se volvía como atrapar una nube con sus propias manos.

En cuanto a lo que el hombre deseaba, no era más que un hecho sólido.

Durante toda su vida, si alguien era inocente, esa persona también debe tener algún rastro de corrupción. Si hubiera una persona cuyo comportamiento solo pudiera considerarse blanco puro, en realidad debe ser negro como la brea.

Sería fácil si esas personas mostraran sus verdaderos colores, pero como no es así, podría decirse que esa es la razón por la cual este hombre fue enviado.

"...Haah."

Su involuntario suspiro no empañó el aire, por lo que se sintió agradecido con el calor de la habitación mientras recordaba el frío prolongado afuera.

Por el contrario, había dos niños, un humano y un beastkin, fuera de la ventana, perseguidos por una joven beastkin mientras respirando aliento blanco. Además, una joven humana corría detrás de las tres personas.

Todos estaban sonriendo.

Al ver el escenario y los eventos suceden uno tras otro, el hombre sin saberlo sonrió.

Había algo que tenía que hacer.

El hombre recordó su decisión y se reafirmó, golpeando el látigo en su mente que había comenzado a perder fuerza. Se puso de pie y estiró su mano hacia su chaqueta.


*


Unos días más tarde. Cuando la nieve que se estaba acumulando se estaba eliminando a un ritmo más rápido de lo que caía, la insatisfacción que se estaba acumulando en la rama finalmente había alcanzado el punto de erupción.

"Ilya, está bien matarlo, ¿verdad?"

"Por favor, no digas algo tan peligroso, Bard-san."

Teniendo en cuenta su origen, ella no lo tomó como una broma.

Probablemente todavía teme a Ilya, Bard guardó silencio como si estuviera enfurruñado. Para compensar eso, una voz vino del otro lado del mostrador.

"Pero ya sabes, nadie que vea a ese tipo piensa que es bueno."

"Nadie apoya a ese tipo, ¿no deberían todos ir a la huelga?"

Al escuchar esa voz proveniente de un asiento contrario, la gente en el comedor dijo su aprobación y aprobación.

"...Todos han sido hechos pasar un tiempo desagradable también. Lo siento."

"¡Ilya no tiene que disculparse!"

"¡Sí, sí! ¡Es culpa de ese bastardo!"

"...Bueno, la razón por la que no podemos trabajar en este clima es también porque estamos aquí con nuestra ira acumulada!"

Ilya lo dudaba.

No tenían tanto poder persuasivo incluso si lo decían; eran clientes habituales que pasaban todo el tiempo aquí de antemano desde antes. Su valentía durante el sometimiento del dragón de hielo no se veía por ningún lado, como si su aliento lo hubiera volado.

Aun así, fue solo al principio que pudieron estar de buen humor con la nieve desconocida. La acumulación gradual de estrés debido a que limitaba sus acciones era real.

(Me pregunto ... ¿hay algo que podamos hacer para aliviar el estrés ...)

Mientras pensaba distraídamente, se podía ver a hombres usando dos o tres capas de ropa para protegerse del frío al entrar a la sucursal.

Aunque la mayoría de ellos se acercaron al calentador de piedra de fuego para calentarse, Darren, un beastkin que era parte del personal de la sucursal, se dirigió hacia Ilya.

"Ilya, el barrido de la nieve del techo se ha completado. Lo confirmé."

"Muy bien, gracias por verificar el trabajo."

Los techos de las viviendas tradicionales de Lunéville eran planos con el fin de aprovechar la poca lluvia, no los que tenían nieve en mente, a diferencia de los inclinados.

Dejando a un lado los edificios de construcción más reciente que eran resistentes, los techos de los ancianos estaban envejecidos y deteriorados, por lo que el peligro de colapsar por el peso de la nieve era alto.

A pesar de que había una necesidad apremiante de eliminar la nevada, no podían desperdiciar excesivamente sus elementos de fuego insuficientes ni siquiera en el mejor de los casos, e incluso la magia no era tan versátil como para ser ajustada lo suficiente para eso. Por lo tanto, los guardias tenían las manos ocupadas con arar la nieve de la calle y el señor no podía soportar la situación por más tiempo, por lo que envió una comisión para limpiar la nieve al gremio.

(...Nieve, ¿eh?)

Con unos pocos recuerdos relacionados con esa palabra, Ilya saludó a Darren, que estaba quitándose la nieve con prudencia.

"Darren-san, ¿qué se hizo con la nieve descargada?"

"La nieve descargada? Se evitaron las entradas y las calles... por qué? había áreas designadas?"

"No, no es nada."

La respuesta que le respondieron fue que no se había hecho nada especial con ella, pero esa era una respuesta conveniente para ella.

Terminado con el procedimiento de completar la comisión, Ilya fue con Héctor durante su descanso.

Ilya se dirigió por la calle usando un chaquetón para no parecer fuera de lugar en la ciudad. Aunque se completó el arado de nieve, las personas que no estaban acostumbradas a la nieve todavía no podían caminar con facilidad debido a la capa de nieve que les llegaba hasta los tobillos. Mientras sujetaba a Haku y se dirigía a la mansión del señor prestaba atención a la cantidad de nieve que había, logró llegar hasta allí sin ser encontrada por el subdirector de la sucursal. Esto no fue una coincidencia, por supuesto, fue debido a que ella usó habilidades como [Inferencia de presencia].

La dejaron pasar sin ningún problema en particular a pesar de ser una visita tan repentina, entonces, encontró a Héctor en el salón.

"Parece que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos, Ilya."

"Sí. Ha sido un poco problemático."

Recientemente, solo habían podido hablar a través de documentos, por lo que el tema naturalmente fluyó hacia eso.

Cuando ella se dirigió directamente al punto y le mostró una oportunidad porque no podía quedarse demasiado tiempo, Héctor la miró desconcertado.

"Tus planes parecen estar bien hechos, y no me importa prestar mi nombre tampoco, pero... ¿estarás proporcionando la recompensa?"

"Sí. Lo diseñé después de todo."

"Puedes sacarlo del presupuesto hasta cierto punto, ya sabes. No estoy alejado de esto ya que soy el Señor, incluso existe la posibilidad de una ganancia si sale bien, ¿verdad?"

Ilya estuvo de acuerdo.

Sin embargo, un suplemento paradójico salió de su boca.

"Aun así, no puedo predecir la reacción sin realmente intentarlo. Además, esta puede ser la última oportunidad."

"...Eso también es cierto."

Sin embargo, aunque Héctor lo admitió, inmediatamente negó con la cabeza.

"No, eso no está bien. Pondré la recompensa."

"Pero..."

"No te preocupes por eso. No estoy ofreciendo la recompensa como el señor, sino como individuo."

Después, aunque los dos hablaron un poco más, Héctor no retiró su respaldo financiero.

Esta era la obstinación de Hector de la que Frank había hablado.

Al darse cuenta de cuán correctas eran esas palabras, Ilya no pudo hacer otra cosa que sonreír con ironía.


*



Al elaborar el cuadro de comisiones ese mismo día, lo colocó en el tablero de anuncios. Varias personas que lo vieron no pudieron creerlo, dejando escapar voces perplejas. Las multitudes reaccionaron como si estuvieran atrapadas en un anzuelo.

"Ilya-chan, esta comisión de Lord-sama... ¿Qué es?"

Al escuchar la pregunta que todos los que estaban cerca estaban pensando, también miraron hacia ella.

Finalmente, al recibir esa pregunta, Ilya sonrió y respondió.

"Al participar, competirás para hacer un monumento con nieve."

Los requisitos de ingreso se abrieron por completo, hombres y mujeres de todas las edades en Lunéville podrían unirse, independientemente de la alianza. Podrían registrarse en grupos de diez o menos y se les asignaría un área para fabricar su monumento. No había límites en lo que podría representarse, con el sabotaje llegando con una multa. Reglas como ir y venir entre ramas se establecerán en el futuro. Los tres mejores grupos principales recibirían un premio.

Hablando en términos japoneses-

"Es un festival de nieve."

Las escenas de un evento de otro mundo pasaron por su mente.

Aunque la gente se ve un poco confundida cuando dijo por primera vez lo que era, la gente puso su nombre en él tan pronto como lo entendieron. Al día siguiente, el área de recepción se llenó de gente, convirtiéndose en una situación en la que el área de recepción se trasladaría temporalmente a la sala privada del segundo piso.

Sin embargo, a pesar de que debería haberse vuelto pacífico después de eso, fue problemático tener que explicar a la gente ocasional que llegó tarde y preguntó acerca de ello.

Pero también hubo problemas en el lado del servicio.

"Cuál es el significado de esto...?!"

"¿Qué quieres decir?"

En el salón del tercer piso, Ilya estaba siendo sometida al interrogatorio del subdirector de la sucursal.

Sus cejas estaban entrelazadas al punto de que uno se preguntaría si no estarían conectadas. Con su sien temblando, era obvio que su nivel de enojo no era normal.

"¡No te hagas la tonta!"

El subdirector de la sucursal golpeó el marco de la ventana.

Más allá de esa ventana, los ciudadanos estaban frenéticos... pero era como si estuvieran disfrutando. Estaban construyendo figuras de nieve.

"¡Los miembros del personal no pueden preparar una comisión que paralice las funciones de la ciudad e involucre a todos los ciudadanos!"

"Entiendo, sin embargo, que esta comisión fue lanzada bajo el nombre de Lord-sama. Los participantes se vieron obligados a llevar a cabo y completar sus deberes personales de antemano también, habían consentido que habría penalidades e incluso la construcción progresará según lo planeado a través de horas extras llevadas a cabo antes de tiempo."

Mientras pensaba que su rechazo era un poco sorprendente, Ilya pronunció las palabras que había preparado de antemano.

No tenía la intención de aumentar deliberadamente el número de cosas problemáticas, pero habría sido desafortunado si ella no hubiera pensado que algo así sucedería.

"¡Sofistería!"

"Él asumirá la responsabilidad también. Aún así, me gustaría que esperaras para ver si ocurre algún problema."

Cualquier cosa que ella dijera habría sido desperdiciada. A juzgar por eso, Ilya decidió llevar la situación a su dominio.

Sin embargo, si todavía no estaba satisfecho con eso, debería estar satisfecho con la declaración de asumir la responsabilidad.

Incluso si su verdadera intención era sobre algo de antemano, ya que ya había comenzado y estaba bajo el nombre de Héctor, Ilya sintió que el subdirector de la sucursal no pudo evitar aceptar la propuesta.

"Gunu..."

Sin embargo, parecía como si realmente no quisiera aceptar lo que ella dijo. Él gimió, parecía como si no fuera a retirarse.

(Apresurate y ríndete~~)

Fue en el momento en que ella pensó eso.

"¡Con permiso!"

"C-cliente, por favor-!"

En cuanto a quién apareció por la puerta inmediatamente después de tocar la puerta

"Mucho tiempo sin verte, Ilya."

Era un chico con cuernos saliendo de debajo de su largo cabello rojo.

"¿Por qué estás bajando la cabeza a un chico así?"

En su espalda había una persona pequeña con alas de mariposa que brotaban de su espalda... un hada.





Incapaz de detenerlos, Cynthia miró a Ilya al borde de las lágrimas. Por ahora, Ilya asumió el control al asentir con la cabeza hacia ella.

Sin prestar atención a Cynthia, que alegremente se había retirado con una reverencia, el niño y el hada entraron al salón.

En el momento en que el hada miró entre Ilya y el vicedirector de la sucursal, suspiró como si perdiera interés y se volvió hacia Ilya. Y, aún de pie sobre el hombro del niño, habló mientras apuntaba con su dedo.

"¡Hemos venido a ayudar con el sometimiento del dragón de hielo! ¡Gracias, Ilya-ane!"

Sin siquiera darse cuenta de que Ilya no podía responder adecuadamente a ella, continuó con un jactancioso jactancioso.

El joven con cuernos y el hada eran amigos de Ilya.

El nombre del hada era Partia.

Tenía tanto poder que, de no ser por la maldición, se convertiría en una Fairiel, una especie superior de hada. Por supuesto, como ella también estaba llena de preocupaciones sobre la posibilidad de que su poder se descargara espontáneamente y se saliera fuera de control si no se convertía en esa especie superior, se podía deducir que tenía un poder anormal.

Había otra persona de interés. Gabriel era parte de la familia del Dios Demonio, que era uno de los tres dioses pilares que igualaban al Dios Dragón.

"...Ilya, estos dos son tu-!"

Antes de que pudiera terminar su frase, una espada blanca y plateada salió del piso, deteniéndose justo antes de su cuello.

Mientras era incapaz de moverse, un pequeño niño del tamaño de un animal de peluche apareció frente a él, apareciendo lentamente desde el suelo junto con la espada.

Era diferente de Partia en que no tenía alas, en vez de eso tenía un sombrero puntiagudo doblado con una larga barba.

[Tu rudeza hacia Miko-sama será compensada con tu muerte]

"¿¡!?"

La voz del niño no llegó al subjefe de la sucursal, solo llegó a sus oídos como vibraciones naturales en el aire.

(Gracias a dios-!!)

Por otro lado, Ilya, que había escuchado bien su declaración y no había cambiado su expresión, gritaba de alivio en su mente.

Era una persona que no tenía la capacidad de escuchar la voz, demostrando ser afortunado en este momento.

Habiendo terminado de hacer su amenaza, no pudo continuar. Ilya sacudió su cabeza hacia Gabriel, indirectamente diciendo que era innecesario.

"Gnomo. Parece que a Ilya no le importa, baja tu espada."

[Pero.]

El niño miró rápidamente a Ilya, quien asintió con la cabeza hacia él.

[...Entendido. Me disculpo por actuar presuntuosamente.]

Mientras hablaba con vergüenza, la espada desapareció junto con la persona pequeña como si se derritiera en el piso.

Su nombre era Gnome.

Un gran espíritu, el espíritu de la tierra mejor clasificado.

Aunque su personalidad generalmente era de mente abierta, Ilya y las gemas eran las dos cosas en las que nunca se doblegaría. Con él regresando obedientemente, Ilya colocó su mano sobre su pecho en alivio de que no se convirtiera en el peor de los casos.

Ser el señor de este gran espíritu fue solo otra cosa que hizo a Gabriel digno de mención especial.

Además de ser un espadachín demoníacamente fuerte al eliminar los límites de las capacidades físicas de su cuerpo a través de sus elementos demoníacos, Gabriel también era un contratista de un gran espíritu que podía manipular libremente los elementos de la tierra.

Además, siempre actuaba descuidadamente con Ilya, como ahora que la saludaba con su mano con las mejillas relajadas cuando se encontraron sus miradas.

Si el contratista no fuera el propietario de una personalidad así, uno o dos países ya podrían haber sido arruinados.

Asegurándose la cooperación de estos dos, era fácil imaginar que podían someter al dragón de hielo a la fuerza, incluso sin un plan. Sin embargo, eso sería si realmente tuvieran la oportunidad de usar su poder.

"Sabes, Partia."

"¿?"

"El dragón de hielo ya ha sido subyugado."

Siendo dicho eso a modo de disculpa, la cara de Partia se congeló.

Contrastando a la chica congelada, Gabriel mostró una sonrisa despreocupada.

"¿No lo dije? Escuchamos el rumor cuando era tan viejo que probablemente ya fue derrotado."

Atacando a su compañero, la linda hada tiró de las mejillas de Gabriel con una cara que parecía querer llorar.

"¿E-entonces es mi culpa? ¡¿Acaso Gab-kun no dijo que quería ayudar a Ilya Onee-chan?! "

"Sí. ¡Yo dije eso! Definitivamente estoy un poco triste por eso, pero estoy feliz de que haya terminado sin que le ocurra nada peligroso a Partia."

"Ah, u... un..."

Partia se sonrojó debido a la sonrisa de Gabriel, llenando de dulzura el aire de la habitación.

(Lo mismo de siempre~...)

Cuando miró al hada y al joven, que parecían como si su intimidad no hubiera cambiado, con una sonrisa irónica, notó que los dos habían dejado de hablar.

En contraste con la expresión siempre calmada de Gabriel, el rostro de Partia se enrojeció como un mini tomate, solo fue capaz de abrir y cerrar su boca sin decir nada.

A Partia le tomaría un tiempo recuperarse. Al concluir eso con la experiencia pasada, Ilya decidió hablar con Gabriel.

"Lo siento, pero en este momento estoy teniendo una conversación importante con el subdirector de la sucursal, ¿podrías esperar un poco más?"

"Sí, entiendo."

Obteniendo su acuerdo, Ilya terminó el asunto con ellos más rápido que de otra manera y se volvió hacia el subdirector de la sucursal.

"...Cuál es el objetivo?"

Escupió las palabras como si lo forzaran.

Era como si temiera algo de un personaje que no conocía, tenía una expresión rígida.

"¿Cuál es el objetivo esta vez?"

Ilya consideró el significado de sus palabras.

Si alguien que solo sabía de su reputación antes de venir a Lunéville estaba relacionado con una organización u otra persona que era hostil hacia ella, entonces probablemente pensarían que estaba tramando algo.

(...Pero no lo he visto antes.)

Aunque intentó recordarlo, no había visto el rostro del vicedirector de la sucursal fuera de Lunéville.

Entonces Ilya decidió ser profesional.

"Parece que Hector-san tiene tres objetivos."

Aunque el subdirector de la sucursal mostró un gran desconcierto, Ilya continuó hablando sin volver atrás.

Hablando con propiedad como si estuviera adivinando, no olvidó enfatizar que el evento fue propuesto por Lord-sama.

"Primero, usar una comisión para quitar abiertamente la nieve. A continuación, para permitir que los ciudadanos expresen su estrés que se acumuló debido a la nevada. Y finalmente... aunque este efecto no puede llegar tan lejos como se esperaba, para atraer a los visitantes a través de la adición de esculturas de nieve."

Desde la expresión del subdirector de la sucursal, era obvio que no era la respuesta que esperaba.

Sin embargo, no había tenido la intención de debatir desde el principio.

"Cuando consideras esos tres puntos, debe quedar claro que hay pocas ventajas en retirar esta comisión... Por supuesto, si hubiera una idea que pudiera servir para estos tres puntos mejor, recomendaría que hablara con Lord-sama para reemplazarla."

"-..."

Ninguna respuesta. Él no podía refutarla ni corregirla. En este punto, no quedaba nada por discutir.

"Entonces, me disculpo, pero debo ir ya que hay clientes esperándome."

Cuando se inclinó y se dirigió a la puerta, Gabriel y Partia naturalmente miraron hacia ella.

Asintiendo con una cara seria antes de volver a sonreír, Gabriel también se volvió hacia la puerta y se fue por ella.

Sin embargo, Partia dio media vuelta y se enfrentó al subdirector de la sucursal.

"Tú."

"¿¡!?"

Sin pensar que le hablarían, se sorprendió.

Partia, mirándolo con una sonrisa perfectamente inocente, habló.

"Si esto te duele, ¿por qué no te paras?"

"¿Qué...?"

Satisfecho con eso, Partia se movió del hombro de Gabriel al de Ilya.

"Ilya-ane, estás envuelta en problemas como de costumbre, eh."

Y susurró eso en su oído.

Esa frase impactante fue totalmente inesperada, pero fue molesto que no pudiera negarlo.